Kase O – Nos englobó en El Círculo renovador

Javier Ibarra y sus compañeros de escenario R de rumba (DJ) y Momo (segunda voz) dieron un show de casi dos horas. Repasaron casi todo el último álbum lanzado, “El Círculo” y también recordaron algunos temas de Violadores del Verso, antigua banda del rapero y el DJ.

Un show que reafirmó el gran momento de Kase O tanto en su faceta de músico, como en la de persona. Un artista que se pone como objetivo contentar, motivar y concientizar a su audiencia además de entregarles una exquisita fiesta de rap. La combinación que destaca a Javier es su flow a la hora de rapear, la calidad de cada una de sus rimas y la claridad con la que canta. Mantuvo concentrado, conectado y danzando a cada una de las personas durante todo el show.

La primera canción como era de esperar fue Intro (El Círculo) que nos dio la bienvenida a ese espacio de creatividad y amor. Terminó ésta y ya comenzó a conversar con el público, al que etiquetó como el mejor del planeta, pidiendo que vivan con espíritu, mente y cuerpo esta experiencia.

Las seis canciones del principio fueron las mismas que las de este álbum y se llevaron a cabo con una similitud sorprendente a estudio. En estas canciones toca distintos temas como la corrupción de los más poderosos, que se ocupan sólo de su beneficio propio (“Esto no para”) y vuelve al pasado para vomitar algunas verdades que le pesaron en su momento. En “Yemen” y “Triste” admite haber tenido una personalidad egocéntrica que le dolía en el fondo, y esa concentración sólo en él lo confundía y lo desanimaba.  En “Guapo Tarde” una de las más atrapantes del show, menciona su baja autoestima y complejos de su juventud que lo deprimían, al igual que en “Viejos Ciegos” con su dependencia al alcohol. Se nota claramente cómo Kase O es honesto con su pasado y eso lo hace poder sentirse libre en el presente.

Después de esta introducción llegaron temas de Violadores del Verso, “Droga Sin Cortar” fue la que apareció primero y más alteró a la gente. En este lapso de recuerdo le avisó al Luna Park que estaban fallando contra el mejor, y elogió nuevamente a las personas argentinas.

Volvió luego de tres temas a El Círculo con su tema más escuchado, “Pavos Reales”, en dónde les da una clase de rap a otros MC y los mata como buen asesino del micrófono. Apuntó hacia arriba e hizo la actuación de que disparaba, bajando a estos pavitos al ritmo de Pa Pa Pavos Rales.

El primer mensaje social de Javier fue a favor de la igualdad de derechos para las mujeres, como algo tan básico como que cobren lo mismo que los hombres no está pasando, dijo. Más adelante también se proclamó a favor del aborto y “tú decides todo” fue el mensaje. Al finalizar el intervalo apareció su tema más funk, el que te hace mover el culo, “No Se Qué Voy a Hacer (Booty Song)”.

Aquí Kase O se abrió y nos contó una historia romántica en la que derivó “Mazas Y Catapultas”, «nena tu eres un desliz, una trampa de amor». Luego un breve encore que nos dejó intrigados porque la historia recién iba por la mitad. Regresó y sonó la excitante y atrevida “Mitad y Mitad”. Ritmo y voz en tono seductor, una letra descriptiva y literal sobre una pareja que manifiesta su salvaje deseo sexual.

Pasada esta historia apasionada y sensual hizo referencia a los bombardeos a los países de oriente por la guerra por el petróleo. Juntos levantamos las manos y con un grito mandamos energía y visualizamos la paz para que estas familias dejen de sufrir sin sentido. Esta mención le abrió las puertas a “Cantando” de Violadores del Verso.

Vino el momento de los invitados, Muphasa MC, freestyler alternativo y la mente detrás del quinto escalón fue el primero. El segundo fue un chico de alrededor 8 años que nos sorprendió con un solo de beat box y luego puso una base para que Kase O haga un rap situacional. Los sonidos del chico parecían sacados de computadoras, eran graves, rugosos y contrastaban con su figura.

Se acercaba el final y nos llevó de lo cotidiano a otra realidad con “Repartiendo Arte”. Al término de la antepenúltima canción rompió el hilo e inició el segundo encore. Las últimas tres canciones, fueron las mismas que su álbum. Así que regresó, se sentó en una silla y cantó “Basureta (Tiempos Raros)”. Canción que expresa su angustia y depresión pasada que no le dejaba ver su éxito y lo dejaba sin ganas de vivir.

Cerró El Círculo con “Outro”, un mensaje motivador que demuestra todo lo que aprendió Kase O en su carrera y vida. Un camino polvoriento que ahora lo encuentra más vivo y entusiasmado que nunca. ‘Les dejo este lema que les pueda servir: “Cuanto más amor das mejor estás”’.

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