Otra noche de viernes en que Niceto abre sus puertas. Otro show de Indios en el lugar, que poco a poco se va transformando en el escenario predilecto de los rosarinos en Capital. Es noviembre y la banda está a punto de despedir el año haciendo lo que más les gusta.
Pasadas las 21.30hs, todo está listo para que comience la velada. Los primeros acordes de «Ritmo y Percepción» seguidos de «Ya lo sé» dieron inicio a un concierto donde no faltaron la euforia y la sensualidad.
Con la solidez y sonoridad de una banda que se mantiene en ascenso permanente, la voz de Joaquín Vitola nos transporta en diversos microclimas que tienen al amor como hilo conductor: Desde ofrecer su corazón a cambio de besos en la espalda hasta transformar la desilusión amorosa mas cruel y volverla canción.
La exploración de nuevas atmósferas en la banda, permiten que Nicolas De Sanctis gane terreno y se afiance cada vez más como segunda voz de la banda, en canciones como “El Sol ya estaba ahí”, “Saudade”, “Luz azul” y “Todas las flores de Enero”, tema estreno de la noche.
Sin diluirse ni apagarse, las nuevas canciones se fueron sucediendo e intercalando con los ya clásicos “Ya pasó”, “Tu geografía” y “Casi desangelados”.
Llegando hacia el final del show, Indios presentó a un invitado especial: Patricio Almeyra, ex integrante, se sumó a “Jullie” en lo que fue uno de los momentos más emotivos y festejados de la noche. Pasaron casi dos horas del momento en que sonaron los primeros acordes, y ya es momento de la retirada. Indios despliega su carta mas intima y suena “Besos en la espalda”, canción que dio nombre a su último disco, y que cerró la noche a pura proximidad.
Otro Niceto que nuevamente colmado los despide hasta la próxima, cuando la banda vuelva a subirse al escenario con la brisa de los nuevos desafíos del futuro.
