Todos bajo el agua

Festival Viaje al Agua Vol.II | Ciudad Cultural Konex | 21.10.2017

Llegamos tarde y ya nos arrepentimos, la Ciudad Cultural Konex nos esperaba desde las 15hs. con la segunda edición del Festival Viaje al Agua, evento curado por la banda stoner-psicodélica argentina por excelencia: Poseidótica. Bueno, eran casi las 17hs. y nos perdimos a Hungría y a Güacho, esperamos verlos apenas tengan una nueva fecha local, sin tiempo para llorar escuchamos al entrar un dirty riff proveniente de la sala de las columnas, era Las Diferencias.

Al Borde del Filo.

Siempre es un placer ver a los ganadores del “Mejor Álbum Nuevo Artista de Rock” de los Premios Gardel 2017 haciendo ese rock-blues nuevo, a veces crudo, improvisado y salvaje, el rock no admite perfecciones ni reflexiones, el power trío sabe retumbar las columnas que se pintan de luces violetas, repiques y líneas de bajo que hacen mover los pies.

Tocan “Privados de la Libertad” de su placa del 2016 “Al Borde del Filo”, es temprano y el público está un poco apagado, pero la vibra de atmósfera subterránea que tenemos en el subsuelo nos hace ignorar a los lentos o críticos puristas. Las Diferencias tienen una actitud innegable y un talento comprobado, es una banda todavía joven pero con un futuro prometedor.

“Ya no hay dinero para gastar” grita el frontman Robledo en su tema más conocido “Emoción y Velocidad”, la audiencia es amplia, entre indies, metaleros y punketos, todos escuchan a Las Diferencias, aprecian y aplauden. En un momento se deja colar un solo de batería de Nicolás Heis, improvisado, tomándose su tiempo nos recuerda a un viejo The White Stripes, algún aullido se escapa del público expectante.

Nos encantó. Las Diferencias cierra con “Está Viniendo”, su stoner tiene personalidad, la banda se afianza en el circuito y estaremos pendientes de lo que venga después.

Fiesta en el Patio.

Salimos mientras retumban los oídos, nos recibe la luz y la dupla de trompeta/trombón característica de Morbo y Mambo, la banda nos presenta su tercer disco “MUTA”, y arranca con “Nuevo Mood” del mismo disco, se llena el espacio mientras se acopla la banda, a bailar, festival.

Suena “Kerosene” y “BS80”, tenemos dub, tenemos rock, tenemos cielo y Konex para rato, algún chico mueve sus pies con timidez mientras una pareja se besa descaradamente al ritmo de la música, tal vez le falta noche al sonido, pero el público se anima a prender la diversión sin que nada importe.

El afro-beat se siente en la ciudad cultural, nadie piensa y todos bailan, los morbos no necesitan muchas explicaciones, les sobra sabor.

Indie Atmosférico.

Moviendo todavía los pies regresamos a las columnas, nos recibe el pop indie de Atrás hay Truenos, banda originaria de Neuquén y pertenecientes al sello Laptra (El Mató un Policía Motorizado, Bestia Bebé) nos presentan su nuevo disco “Bronce”, entre guitarras estridentes y voz suave, con puesta en escena psicodélica y visuales en drogas.

“Repito lo mismo y vuelvo al principio” canta Roberto Aleandri entre sintetizadores depresivos en el tema “Pantano”, los truenos es la banda que formabas después del colegio con tus amigos, letras íntimas, sonidos experimentales y pasión desbordada.

El frontman pide entre canciones que “abramos los ojos” para las elecciones del domingo, y sirve como analogía necesaria en tiempos como estos, en ocasiones la música es el escape, pero también es la solución.

Motosierra: El punk no espera por nadie.

El nombre del festival no podía ser más irónico, cuando salimos a esperar a Poseidótica, las nubes se juntan y llueve en Buenos Aires, el viaje al agua cumplía su ciclo en esta segunda edición, y aunque los progresivos empezaban a sonar con “Anfibio”, detienen el recital para darle paso a Motosierra, el patio completo regresa empapado a cubrirse bajo el techo que rápidamente se vuelve calor con el hardcore-punk de los uruguayos.

Rompe el rock, la escena de frontman -a la Iggy Pop- de Marcos Fernández es agresiva, desesperada y necesaria para la noche, guitarras salvajes se mezclan con la voz rota de Motosierra, da igual si no entendes lo que dice, se siente y nada más importa.

Afuera llueve pero adentro hay pogo, algunos se suman y otros se asustan, fuego y punk mientras se grita “Vamos a seguir con la pavada”. Viaje al Agua es un festival ecléctico, suerte de melómanos nosotros que sabemos apreciar el regalo que es la música, como el agua que moja el patio de la Ciudad Cultural Konex.

Anfitrión de Culto.

El agua paró pero seguimos adentro, en interludio esperamos que el cabeza de cartel se presente bajo el techo, se aprovecha el momento para una cerveza más, un trago de jagger y revisar la miniferia de merchandising, discos de las bandas presentes, vinilos de Exiles Records y remeras de Poseidótica que algunos fanáticos compraron y vistieron inmediatamente, la banda de post-rock psicodélico tiene una larga fila de seguidores fieles, merecidos todos.

Suenan como headliners, guitarras sincronizadas, tiempos de prog y onda multicolor, arrancan con “Holograma” y “Videogame”, Poseidótica es de las mejores bandas del género en la actualidad, se dan el lujo de invitar integrantes de Morbo y Mambo y seguir sonando de lujo. Tocan “Elevación” del álbum “Crónicas del Futuro”, Broide en la batería destaca del resto.

Como invitado especial en la guitarra, Baltazar Comotto (Indio Solari, Calamaro) sube al escenario para acompañarlos con “Aeroruta” y un excelente cover de Almendra “Ana No Duerme”, los proggers despiden un largo día de pura buena música y cierran con “El Dilema del Origen”.

El festival llega a su fin, escuchando las palabras de Hernán Miceli de Poseidótica “Aguante mezclar géneros, aguante la versatilidad”, el público regresa de la travesía techada a un Konex de charcos de agua, buena música y mejor escena local. Aguante el viaje.

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