Crónica TV es un canal siempre rodeado de polémicas, con imágenes icónicas que se repetirán hasta el hartazgo. En los últimos tiempos, luego de la muerte de Hector Ricardo García, ha intentado renovar esa imagen y volcarse a lo periodístico de manera más formal pero sin dejar su estilo. En ese proyecto inteligente y ambicioso encontramos a Seres Libres, un programa creado y conducido por Gastón Pauls.
A comienzos de febrero, nos enteramos del lanzamiento de este programa que marca una diferencia en la televisión argentina. Gastón es una persona que ha demostrado saber conducir estos productos que se acercan a sectores marginados de la sociedad: «Ser Urbano» y «Humanos en el camino», entre otros. Por eso, no nos sorprende esta apuesta en donde el principal mensaje es ser un programa de servicio, dispuesto a ayudar al adicto/a que no sabe como luchar contra ese problema.
La vuelta de tuerca que seduce y que hace al programa más interesante que la media es la participación de personajes de la televisión, la música y las artes. Testimonios crudos, con situaciones límites, con anécdotas que pueden llegar hasta sacar alguna sonrisa. La información que se presenta a lo largo de la charla hasta puede cerrarnos algunos círculos sobre momentos de la vida de esas personalidades.
A lo largo de los programas hay dos aspectos que valen la pena destacar muchísimo, uno es el formato en vivo porque Pauls comienza su programa dando un mensaje en el momento y presentando el contenido del programa. El otro es la profundidad de la entrevista y del testimonio, que el conductor haya pasado por lo mismo lo lleva a preguntar cuestiones que pueden estar fuera del radar de cualquier entrevistador.
La conexión con instituciones de contención para los adictos también es un aspecto que funciona muy bien dentro de Seres Libres. Palabras de superación, mensajes reales, lejos de slogans chabacanos que romantizan el consumo. Una pieza de colección en un prime time totalmente pauperizado, y que nos hace volcar por decantación al streaming.
La frase «Cárcel, Hospital o Muerte», nombre de un tema de Bersuit del disco La Nube Rosa suena como un rosario que se repite hasta el hartazgo. Esos tres lugares son a los que conduce el consumo de drogas y a lo largo de los episodios, Pauls, más maduro que en sus versiones anteriores, esgrime ejemplos que le dan la razón.