Es interesante encontrar artistas que durante la pandemia se reinventaron, buscaron nuevas alternativas de estar cerca del público y cautivar nuevos fans. Una de esas artistas es Rudy, quien durante este 2020 hizo un concierto por streaming, grabó varias colaboraciones y preparó un disco presto para lanzar en 2021. A lo largo de esta charla nos contó mucho sobre su reinvención y sobre el lado B que tiene la industria en producciones de altísimo valor.
El 2020 se cierra con un montón de objetivos cumplidos y con algunas novedades aún por presentar. ¿Cómo fue el proceso que realizaste para que la máquina no se detuviera a pesar de todo lo que pasó en el mundo? ¿Sos de crecer en las adversidades?
Creo que la misma pandemia me ayudó a que todo siga su curso, ya que por primera vez en años me encontré encerrada en mi casa, sin nada que hacer más que pensar en canciones y tocar el piano. Además, en estos tiempos creció mucho la idea de la virtualidad como algo cotidiano y, en ese contexto, se acabaron las excusas para trabajar con artistas a distancia. No sé si me puedo jactar de crecer en las adversidades, pero sí te puedo decir que vi en este año una oportunidad para producir mucho material.
Hace un mes tuviste la experiencia del concierto en streaming. ¿Cuál es el balance que hiciste del mismo? ¿Cuáles son los aspectos que entendés que se pueden mejorar de cara al futuro? ¿Te convenció el formato para tu experiencia como artista?
Nos gustó mucho la experiencia. Nos puso a estudiar mucho porque no es lo mismo tocar en vivo con público a tocar con cámaras registrando todo. La gente puede dejar pasar errores, todo se trata de cómo se sienta la música. En cambio, las cámaras no sienten nada! Es todo más frío y hay que estar afilados para tocar. En un futuro, nos gustaría contar con una mejor estructura para hacer los streamings. Lo vivimos de una forma autogestiva y muy a pulmón, lo cual es fantástico, pero no pudimos generar ingresos económicos y fue una producción tremenda. Hay que ir preparando ese terreno a nivel producción y también concientizar al público sobre el trabajo artístico de los shows.
El año pasado editaste un villancico y en este 2020 lo repetís con otro músico. ¿Cómo es tu relación con el momento navideño?
Me gusta mucho el género porque siento que hay mucho por hacer. Es una apropiación cultural muy interesante. Me gusta indagar en la interpretación que le damos a la navidad, en términos más allá de la vorágine consumista que nos azota cada fin de año. La nostalgia de esos días, comer pan dulce en verano con 40 grados a la sombra. Creo que es algo divertido y me encanta jugar con ese universo.
Con los últimos lanzamientos hiciste de las colaboraciones una forma de trabajar. ¿A qué se debe la decisión? ¿Que sentís que es tu aporte más fuerte en este tipo de proyectos?
Todo se fue dando con las colaboraciones, no fue algo planificado. Creo que todo parte de mi deseo de compartir con otros músicos y aprender de ellos. Cada colaboración fue con personas muy talentosas que admiramos, entonces ¿por qué no hacer así? Mi aporte más fuerte, no lo sé… creo que es algo que deberían contestar los otros.
¿Cuáles son los planes que se pueden contar para el 2021? ¿Tenés la decisión tomada de retomar los shows con público apenas se pueda o sos prudente?
Para el 2021 tenemos pendiente nuestro tercer disco, el cual ya grabamos. Mientras tanto, seguramente me voy a divertir planificando videos u otros singles. Y con respecto a los toques, es algo que pensamos hacer apenas tengamos la chance. Espero que sea pronto.
