«Los Wonderboys»

El Kuelgue en Ciudad Cultural Konex 11.02.17

Entras al patio de la casa del Konex con la luz de la tarde yéndose, te recibe el telonero Juan Ingaramo, quién con sus melodías te recuerda un poco a los  Illya Kuryaki and the Valderramas,y otro poco a un pop vintage. El mismo genera sonidos que te hace mover el cuerpo en un vaivén lento pero continuo, que repiten los menos tímidos del público.

Con un escenario que los espera, y el día ya apagado, aparece El Kuelgue en fila india, eligiendo subir por delante del escenario dando comienzo al verano fierrín en el parador del barrio del Abasto.

Atravesando por sus 3 discos de estudio, nos cantan sus letras diversas, actuales y barderas. Dividen al público en sectores A, B, B Metropolitana y C. Las pibas de la primera fila del “B” le piden, en cada oportunidad que pueden, su “Cariño Reptil” al frontman Julián Kartún, manifestándole que es un “Wonderboy” o creyendo que en realidad Cristo no es Marquitos Di Palma, sino él. Buscan “La Fama” cada vez que las nombran por sus gritos agudos y persistentes, y se permite pensar, la que les escribe, que un “Clonazepam” no les hubiese venido mal.

Entre tema y tema, grito agudo con hiatos, y cambio de músicos en el escenario, la improvisación, inteligencia y elocuencia se hicieron presentes principalmente entre Julián y Santiago Martínez (voz y teclado). Sus almas de actores histriónicos trajeron al momento personajes de diferentes tipos de ciudadanos, que diariamente los encontramos en los medios de comunicación emitiendo su pensamiento contra todo lo que “no” está bien.

Como conclusión, a lo largo de la noche, cada músico de “El Kuelgue” manifestó su excelencia y calidad en lo suyo, presentándose en constante movimiento y espontaneidad, brindando un recital divertido y multifacético. Entretenimiento asegurado es lo que ofrece una banda que crece y cautiva.

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