Tres semanas después del enorme show en Museum, el cual sirvió para mostrar de manera completa “Biblia Ovni”, la placa editada en 2015, Massacre volvió a la zona de San Telmo para presentar un concierto de esos que va a ser difícil que olvidemos. Las razones son varias: certeza, set list, climas, feedback y rock, algo que le sobra por todos a este grupo de muchachos.
El comienzo fue puntual, y la gente fue colmando las instalaciones durante los primeros 3 temas, debido a que había un segundo turno, el horario debía respetarse a rajatabla, y Massacre tampoco quería dejar canciones afuera, fueron 25 aproximadamente durante este concierto.
Si te preguntas cuantas canciones del nuevo disco sonaron, no fueron más de 3, dándole un marco más selecto al show porque se repasaron todos los clásicos en reversiones que las embellecen y le dan un valor mayor para los que las vienen escuchando hace años. “Try to hide” y “Mi mami no lo hará”, pueden ser los destacados de lo viejo, de lo de esta década se rescata la versión para enmarca de “Celebrity”.
La parte final fue furibunda y nos dejó con ganas de muchas canciones más, pero ya era tarde. Hay que estar atentos a estos shows esporádicos de Wallas y sus muchachos, no le debe temblar el pulso a uno cuando se afirma que Massacre es de las bandas de elite para ver en vivo en nuestra escena, siempre pasan cosas buenas sobre ese escenario, más si suenan las composiciones que vivimos el sábado último.
