Sabiendo que vamos a hablar del doblete en Vorterix de una banda que lleva más de 15 años en la escena musical, y que en estos últimos años se consolidó como una banda exitosa argentina, de esas que telonean a Paul McCartney y encabezan las grillas de importantes festivales; sabiendo que es una banda que ya cuenta con un público fiel que asiste cuando se presenta la oportunidad a cada uno de los recitales, debemos considerar a esa considerable porción de gente nueva que descubrió a la banda hace poco o que por primera vez compró una entrada para ver en vivo al Kuelgue, ¿con qué se puede encontrar?
Hay que tener en cuenta que no es un recital donde se reproduce un recopilado de los mejores temas de sus discos y nada más. Es un show, considerando, más que nada, a quien está al frente de la banda, Julián Kartún, el gran showman.
Por supuesto sonó lo mejor de sus cuatro discos, una lista equitativa entre ellos que abrió con “Planeta Numir”, la primera de Fierrín Lado A, a las nueve y media de la noche. La atmósfera del escenario era espacial, podríamos decir que iba más allá de la atmósfera. Un suelo lunar y luces que vestían a los músicos de azul. Siguió con el clásico, “Circunvalación”, interpretada por un Kuelgue vestido para la ocasión, todos de gala: con camisa, algunos con tiradores, otros con saco. Interpretaron los clásicos de Cariño reptil, Ruli y Beatriz: “La fama”, “Sabías que hoy”, después agregaron un poco de ritmo con “Sin parangón”. En “Si no te vas” cantaron a dueto Julián y Santiago Martínez, cediendo el teclado al amigo de la banda Julian Scarinci, y dejando un momento para que a Pablo Vidal lo apunten los reflectores y se luzca con su saxo. No dejaron pasar la oportunidad de agradecer al público haber agotado hace meses las dos fechas en el Teatro Vorterix y transmitiendo la importancia de “aprovechar el hoy”.
La noche continuó con “Ayer Real”, procediendo al hit “En Avenidas” momento en que se dieron el lujo de invitar al escenario a Juan Ingaramo, quien cantó algunas de las estrofas del tema que nunca puede faltar. Tampoco pueden faltar las improvisaciones de Kartún, que toma el micrófono con autotune y canta o tira chistes sobre una base de trap, cumbia, o una canción suya. Bien sabemos que no son solo chistes, siempre aprovecha esos momentos para opinar sobre la actualidad del país y recibir el aplauso de la gente a cambio.}
“Parque Acuático” es el momento intimo favorito del público, esa carta que deben jugar siempre. El momento en que Julián canta únicamente con Nicolás Morone en la guitarra y el teatro entero canta a puro pulmón. Siguiendo la línea emotiva, suena “Carece de sentido”, línea que luego se rompe con el enganchado de “Lucho Gorrión”, “Salidera”, “Wonderboy”, y “Bossa & People”.
Siendo más o menos las diez de la noche y con un repertorio de canciones conocidas de hace rato, fue el momento de Fierrín. Primero con “Natación”, recién salida del horno, canción que integrará el Lado B de Fierrín y que fue cantada por unos pocos que hicieron la tarea en dos días y se la aprendieron. Luego, “Jimena” y “Sabandija”, integrantes del Lado A.
El baile llegó para protagonizar la última tanda de la noche: “Amor, comprensión y ternura” en medio de humo rojo y un show de lasers, “Dele tiempo”, “Por ahora” y “Cristo es Marquitos Di Palma” pidiendo la separación iglesia-estado, ya que estamos. “Cariño reptil”, y “Góndola” para cerrar una fecha sold-out llena de risas, baile y música.
Las del viernes 23 y sábado 24 fueron dos fechas para celebrar el exitoso presente de Fierrín Lado A, y aterrizar en lo que va a ser el lado B próximo a estrenarse. Un nuevo disco del que ya conocemos dos canciones y que nos invita a pasar de la galaxia-ovni al agua, el parque acuático.
El show entretiene a aquellos que asisten por primera vez tanto como a los que dicen presente hace tiempo. Puede ser la decimocuarta vez que vas a verlos pero siempre va a ser un placer. Siempre vas a bailar al ritmo de Bossa & People. Siempre te va a sacar una sonrisa el showcito de standup de Kartún. Siempre te vas a quedar boquiabierto frente al solo en el saxo de Pablo Vidal. Siempre vas a gritar el “Actitud, amor y respeto”. Siempre vas a saltar al ritmo de “un poco si un poco no”. Y siempre vas a querer volver.
