El ganador del Grammy a Mejor Álbum de Jazz Vocal visita Argentina por primera vez.
Gregory Porter, cantante, compositor y actor de Carolina del Sur, ganador del Grammy este año por su cuarto disco “Take Me to The Alley” visita Buenos Aires este próximo 08 de octubre (¡aleluya!). Pocas veces podemos ver un artista de este calibre en el mundo jazzistico en la ciudad, una noche que promete gospel, soul, R&B y porsupuesto, jazz; del bueno, del que Blue Note Records sabe presentar.
Porter nació en la ciudad de Sacramento, hijo de una ministra religiosa. El corpulento barítono comenzó una carrera como jugador de fútbol americano colegial, pero que lamentablemente (ni tanto) se acabó por lesiones a temprana edad, Gregory decidió dedicarse a desarrollar otro de sus talentos, la voz.
Mudado a Nueva York, residente vocal de un bar de jazz, fue descubierto por el sello Motema, donde lanzó dos discos: “Water” en el 2010 y “Be Good” en el 2012 recibiendo maravillosas críticas por parte de los más importantes medios de jazz estadounidenses, fue en ese entonces cuando llamó la atención de Blue Note Records, casa de los más grandes jazzistas de la historia donde hoy comparte el spotlight con Robert Glasper, Tony Allen, Charles Lloyd y José James.
En el 2013 publica “Liquid Spirit”, impresionante álbum con una orquesta de lujo, ganador del Mejor Álbum de Jazz Vocal en los Grammy del 2014, de esta placa destacan los temas “Hey Laura” y “Lonesome Lover”, un discazo de principio a fin, que vendió millones de copias en el mundo entero.
“Take Me to The Alley” vió luz en septiembre del 2016, con un Porter en su mejor momento, un compositor nato, un mixture de gospel y jazz, una voz que nos recuerda a Nat King Cole (una de sus más grandes influencias), un disco que nos regala el Porter más dulce hasta la fecha, un artista que sabe a donde llevar a sus audiencias, y nosotros, confiamos ciegamente en su calidad.
Este 8 de octubre el Teatro Coliseo se levanta para dar testimonio a la palabra de Porter, listos para escuchar lo mejor de su repertorio, lo nuevo, viejo y seguramente algunos tributos merecidos a lo mejor de la música que dió inicio a todo, el jazz.
