Eruca Sativa en el Luna Park
Cuando escucho, y cada vez más seguido, que el rock está muriendo aparecen, alrededor del mundo, movimientos sísmicos que dan señales de vida, para todos aquellos que necesitan un sacudón para despertar. No solo esas señales son necesarias, sino que en todo movimiento, hay una cabeza o un epicentro.
El jueves en el Luna Park pudimos ser testigos, no de un simple show presentación de disco, sino de una celebración de la música, por músicos, de un ya no tan desconocido under, para otros músicos y para todos aquellos que pertenecemos al movimiento, que cada vez pisa con más fuerza en los distintos escenarios de nuestro país.
Fueron dos horas donde Eruca Sativa flameó fuerte la bandera de referente de este movimiento, Marilina Bertoldi estuvo en una versión totalmente renovada de “Lo que no ves, no es”, en lo que fue uno de “los momentos” de la noche, ver a las hermanas Bertoldi en un mismo escenario.
David Lebon, quien no resistió la ocasión y conto con alegría la vez que los cruzó por primera vez, se sumó para aportar con “Noche de perros” y la mítica “Seminare”, cantada por todo el público asistente.
En “Haku Malvin: el visitante” se produjo un momento muy especial, en los coros fueron parte los cantantes de muchas bandas amigas y aún emergentes, lo que significó un fuerte espaldarazo para todo lo que va a venir. Entre estos cantantes estuvieron: Luciana Segovia de Cirse, el Negro Villacé de Bigger, Nicolas Alfieri de Todo Aparenta Normal, Ignacia, Larro Carballido de Mas que Uno, Gustavo Cortes de Sig Ragga, Julian Baglietto de Huevo, Luciano Farelli de Parteplaneta, entre muchos otros colegas. Por su parte, Hernán Rupolo tuvo su lugar en una versión poderosa de “Japón”.
Juan Pablo Rufino y Nicolás Sorín, demuestran que el amor se hace muy presente en un proyecto musical, y acompañaron a Eruca en varios temas, sintiendo que la comunión también va por dentro.
Tal vez, con todo lo que había pasado, no había de esperar más sobresaltos, pero la sorpresa fuerte de la noche fue la incursión de Abel Pintos para sorprendernos con su voz en dos composiciones muy emocionantes: “Somos Polvo” y “Amor Ausente”.
En tiempos donde las demostraciones de apoyo escasean en la escena, Lula, Brenda y Gaby nos dieron, quizá, la lección mas importante de todas, CRECER no viene solo, alrededor uno debe aprender muchas cosas nuevas para no quedarse en el camino.
SOMOS POLVO.