La noche del 5 de diciembre de 2025 marcó un antes y un después para Cruzando el Charco. La banda platense coronó una década de crecimiento constante con su primer Movistar Arena repleto, un concierto que combinó emoción, invitados de lujo y una lista de temas que recorrió todas las etapas de su historia.
El arranque fue con “Cada error”, precedido por una breve jam que funcionó como calentamiento y encendió al público desde el primer minuto. Sin pausa, “A mil” y “La última carta” consolidaron un inicio intenso, sostenido por un sonido nítido y una banda afilada. El primer gran estallido colectivo llegó con “Lo nuestro tiene magia”, que convirtió al estadio en un único coro.
El tramo de colaboraciones comenzó temprano. “Hoy” sumó la presencia de Benjamín Amadeo, aportando una versión más amplia y emotiva. Luego, con “Cambiando de color”, apareció Bait, aportando frescura al set. El bloque continuó con un pasaje acústico que dejó ver la faceta más sensible de Francisco Lago. Allí brillaron “Roto” y “Coleccionando cicatrices”, ambas acompañadas por la voz delicada de Sonia Álvarez, logrando uno de los momentos más íntimos de la noche.
La emoción subió otro escalón con Nahuel Pennisi en “Sin final”, seguida de una nueva jam que mantuvo al público en un clima envolvente.
En el segundo set, “El verano” y “Dueños del ritmo” marcaron el regreso a la energía alta, potenciadas por la participación de Juan Subirá, quien también se sumó a “Mi partida”. El público explotó con la aparición de Chano para “Nada nace”, uno de los duetos más celebrados. La seguidilla continuó con “Volver a nacer”, “33” —con Beto Olguín—, “La señal” y una intensa “El trato”, nuevamente con Pennisi.
Ya hacia el final, el debut en vivo de “Harto” sorprendió y funcionó como bisagra hacia un cierre de fiesta. “Adonde están”, con presentación de la banda incluida, abrió la recta final que continuó con “Soy” y un guiño instrumental a “Verano del ‘92” de Los Piojos.
Los bises fueron puro corazón: “Puede ser”, “Para mucho más” y “Terminales” sellaron una noche que la banda y sus seguidores recordarán por mucho tiempo. Cruzando el Charco no solo llenó el Movistar Arena: lo hizo suyo. Y dejó claro que su historia todavía tiene varios capítulos grandes por delante.
Fotos: Federico España
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