Hace unos días, La Perra que los Parió llegó al Estadio Obras para vivir una noche inolvidable. Unos días antes de ese momento bisagra, charlamos con Nahuel Amarilla a modo de balance.
La Perra fue parte de una camada grande de bandas que hicieron muchísimo por la escena del under a comienzos de los 2000, vivieron la tragedia de Cromañón en carne propia y siguieron haciendo canciones en busca de visibilizar un mensaje. Hoy están a punto de editar un nuevo material llamado «Abran Paso», el mismo viene con un concepto ambientalista incluido y la producción de Mateo Moreno.
«La Perra» es una banda con 20 años de ruta. ¿Cuáles son las cosas que se mantienen de aquel comienzo y cuáles son las que quedaron atrás?
El amor y la pasión con la que se hacen las cosas siguen intactos. El amor por la música y dar un buen show. La pasión por hacer y superarnos cada día. Creo que atrás quedaron la ingenuidad, y el creer que con hacer buena música alcanza, y la verdad que no. En la industria musical argentina, para ser reconocidos también juegan otros factores que no tienen que ver con lo musical.
Fueron parte de una generación de bandas, de las cuales mucho ya no están tocando. ¿Cuál es el diferencial de La Perra que los Parió para mantenerse activa y con ganas de mucho más?
No sabría decirte cual es la diferencia, ni por qué. Solo sé que nos mantuvimos fieles a nosotros mismos, que nos gusta mucho tocar y producir. Amamos lo que hacemos y somos perseverantes.
No sé cuál habrá sido el motivo de separación de otras bandas. Es muy triste cuando eso sucede. Lo que sí sé, es que año tras año vemos como muchos esfuerzos y apuestas de muchísima gente se diluyen en esas separaciones. Porque se disuelven grandes y buenas bandas que han tenido una exposición importante y lugares importantes en los principales festivales, como para figurarlo de alguna manera.
Nosotros sin nada de eso acá estamos.
«Abran paso» es el nuevo material y viene con la temática ambientalista bajo el brazo. ¿Cómo decidieron encarar el mensaje para intentar no ser trillados ni demasiado técnicos en algo tan complejo y difícil de concientizar?
Para profundizar en el mensaje están los que saben, nosotros solo intentamos aportar a una causa urgente, necesaria y que nos involucra a todxs, dejarles pensando. Sabemos por experiencia navegando en la industria que podes tener el disco del año, y es probable que la industria no te dé ni la hora así que decidimos tratar de dejar un mensaje que vaya más allá de las canciones. De modo que si con el disco no pasa nada, dejemos algo más que canciones, es por eso que la idea de Eli Obregón, nuestra diseñadora, de resignificar cada letra en clave ecológica y al menos tratar de instalar la temática entre nuestros seguidores nos pareció muy buena. Ya con poder concientizar sobre esta problemática a algunas personas, estaremos felices.
Encaramos la temática desde las ilustraciones, donde podes ver, la industrialización de animales, la contaminación, el extractivismo, la deforestación y para cada canción utilizamos paratextos extraídos de “Extinción”, el libro de Flavia Broffoni, con el permiso de su autora, claro. Ese libro me hizo comprender muchísimas cosas y unir problemáticas que creía separadas. Ser trillados o no con el tema es lo que menos nos interesa, la crisis ecológica y climática que atraviesa el planeta no entiende de eso. Que es complejo, si, es complejo, por eso ojalá los gobiernos se lo tomen en serio y agreguen estos temas a su agenda política, pero de manera sincera y no con el afán de sumar votos.
¿Cómo fue el trabajo con Mateo en la producción? ¿En cuáles aspectos los potenció?
El laburo con Mateo fue intenso y de mucho nivel. Nunca encaramos una preproducción y una producción como lo hicimos con “Abran paso”. Mateo es un tipo que sabe mucho y sabe lo que busca. Ha superado ampliamente mis expectativas.
La banda suena renovada, nos potenció muchísimo en lo sonoro. En este disco cada sonido se luce, cada instrumento. Le dio una vuelta de tuerca interesante a la banda.
La Perra que los Parió es una banda que rodó muchísimo por todo el país y un poco más. ¿Cuál es la anécdota que más la marcó para ser lo que es hoy?
Lo que siempre me impacta de las personas que nos vamos cruzando en el ambiente es la humildad y el compromiso, y por ese lado queremos ir. Por ejemplo, cuando estrenamos el video filmado en las Islas Malvinas, Chizzo nos quiso conocer y nos invitó al estudio de La Renga en Ezeiza. La humanidad y humildad de ese chabón me impactó, cuando conocimos a los NTVG en 2007, la simpleza, la generosidad de una banda que ya la venía rompiendo, o los pibes de La Beriso, con quienes nos conocemos desde antes de que exploten y hoy siguen siendo los mismos, no cambian.
Todas esas bandas tienen claro que quieren, hacia donde van y quienes son. Queremos ser una banda de rock, de canciones que no pierda la esencia, más allá de lo que logremos. No perder la humildad y ojalá, en algún momento, podamos devolver a quienes vienen detrás, algo de lo que a nosotros nos brindaron quienes van adelante.
Nosotros también sabemos lo que queremos y eso es hacer música, canciones, dejar un buen mensaje. La música siempre nos salva como músicos y como escuchas. Vamos para adelante, a pesar de los palos en la rueda de la industria. Y vas a decir que me la agarré con la industria toda la nota, pero es así. Acá no interesan la trayectoria, la música, solo hay intereses y en el medio estamos los artistas independientes. Si no fuéramos perseverantes y seguros de lo que queremos, quizás ya no existiríamos más, porque en el camino son muchas las trabas y las decepciones pero la música siempre nos salva.