El proyecto de 7mo Prisma es uno de tantos en nuestra escena que lucha por mostrarse y salir a la luz. «Eterno» es el primer Ep de los chicos que vienen trabajando mucho en el último año. Con varias fechas por adelante y para conocer la cocina del disco charlamos con Mariano González y este fue el resultado de la charla.
Dos años de vida del proyecto y el mismo fue mutando en su formación. ¿Cómo fueron esos cambios y que los llevó a tomar la decisión de incorporar una guitarra fija?
Mariano: Si, el proyecto tuvo muchas versiones diferentes de sí mismo. Que lo veo como un buen síntoma, muestra de movimiento, creo que nos pasa a todos en distintos ámbitos. Primero, Nahuel Abeijón y Emanuel Vergara (bajista y cantante de la banda) se conocieron en el barrio (como en muchas otras historias de amor), y empezaron a trabajar en bandas de pop y soul juntos. Luego, se incorporó Nico Córdoba en teclados, y esa adición empezó a generar un giro hacía otro lugar, hasta que la llegada de Hernancito Illanes terminó resolviendo en lo que se conoció durante mucho tiempo como 7mo Prisma.
Luego de un tiempo y después de compartir otros proyectos musicales, me incorporan a mí (Mariano González) en guitarra, no solo producto de una amistad muy linda, sino derivado de la idea de hacer algo juntos, de buscar sonidos y texturas nuevas, de intercambiar y conjugar las ganas de hacer música muy divertida y placentera.
«Eterno» es el primer EP de la banda. ¿Con cuáles miedos entraron al estudio y con cuáles certezas salieron del mismo?
Mariano: Creo firmemente en el hecho que la banda no fue con miedos a grabar, y eso se escucha en lo relajado que suena el disco, en sintonía con las composiciones, que apuestan a lo climático y lo progresivo. Obviamente hubo ansiedades y ganas de grabarlo a toda costa, que es natural, pero las grabaciones en el Estudio Insigno (de Mariano Otero), lideradas en producción musical, como durante todo el proceso de creación del mismo, por Hernán Berni Barone resultaron muy gratas, y creo que se produjo un material del cual estamos todos muy orgullosos por cómo se dio en ese momento, y por lo que se viene ahora con el mismo.
¿Cuáles son los disparadores conceptuales de la obra? ¿Quedaron muchos temas afuera o sabían que estos iban a ser los elegidos?
Mariano: Cosas que nos pasan, que nos pasaron, que les pasaron a los que nos rodean. Hablar de los que están iluminándonos hace poco en esta vida, que crecen y crecen y así con ellos nosotros también crecemos. De los que ya no están más en este plano, pero que ascendieron a muchísimos más dentro de nosotros. Esas creo que son consignas recurrentes dentro de la obra de la banda, e incluso temas de la etapa previa al EP tienen un poco de aquello que caracteriza a Eterno, no solo en su lírica, sino en su discurso en conjunto.
¿Cómo se viene de fechas lo que queda de 2019? ¿Cuáles son los objetivos para el 2020?
Mariano: Estamos (y venimos!) con un montón de fechas, y la idea es que eso continúe durante el 2020. Mientras, seguimos craneando en nuestra Guarida Prismática más temas nuevos que por suerte siguen naciendo. Por lo pronto, este sábado 19 de octubre vamos a estar en Hawaiian Love (Juan B Justo y Cortina), el 9 de noviembre vamos a estar con la Crewrod en el ciclo Skill Session que celebran unos amigos en La Gran Jaime, y el 23 de noviembre en ¿“Lobo Está”? .