Es sábado, la tormenta se avecina, y la Av Niceto al 5500 se llena una vez más de público joven, del seguidor de la ola indie en constante ascenso que impacta en la escena de la música argentina. Se escucha tango y el escenario está ambientado como un típico departamento ruso de los años ´60, con alfombras en el piso tanto como en la pared. Lo que se puede observar no es nada menos que la tapa del disco: sillones vintage, mesa ratona con flores y botellas de vodka. El Ruso nos abre las puertas del living de Conociendo Rusia.
Adentrándonos en el corazón de la banda, ¿Con qué nos encontramos? Estamos yendo a ver la banda de ese chico de pelo amarillo y camiseta de Atlanta… Esa banda que arrancó hace poco, que tiene solo un disco…. La del hijo de Leo Sujatovich, el tecladista de Spinetta Jade… Los del videoclip Loco en el desierto…
Y ahí es cuando aparece el “pero”. Porque Conociendo Rusia es más que eso y se abre camino a mucho más. Es una banda con nombre e identidad propia, que forjó su propio estilo y que no para de crecer en la escena nacional como en el resto del continente. Tal es así que el próximo 18 de mayo participará del Festival Marvin en México. Este año tuvo su lugar en festivales como el Buena Vibra y el Nueva Generación, y en el de mayor renombre, el Lollapalooza Argentina.
El show del 4 de mayo fue el primer Niceto de la banda para presentar su disco debut homónimo. Se pudieron escuchar las siete canciones que lo componen y un plus de algunos temas nuevos. Porque sí, ya están trabajando para lanzar nuevo material este año. Participaron en el escenario Nicolas Btesh en guitarra y coros, Guille Salort en batería, Juan Guimenez en el bajo, Fran Azorai en teclado, y Feli Colina en voces. El ruso, Mateo Sujatovich, se mostró muy agradecido a lo largo de toda la noche, declaró que este Niceto para él significaba un antes y después en su vida, ve mucho valor en toda esa gente que compró una entrada para ir a verlo tocar.
A las 22hs comenzaron con el recital que daría cierre a una etapa. De espaldas, como si fueran una imagen estática, con “Cite Tango” de Piazzolla de fondo. Sujatovich con sus gafas vintage amarillas y un saco de piel. Abrieron con “Lo que pasó”. Sus canciones hablan sobre el (des)amor y lo inevitable, la atmósfera durante toda la noche fue muy íntima, había un ida y vuelta entre el público y El Ruso que no en cualquier show pasa.
Todos los temas fueron a banda completa salvo dos de los nuevos que eligió presentarlos en solitario. Sonó el último single “La mexicana”, que tiene un estilo diferente a lo que es el disco pero que de todas formas fue muy bien recibido por el público. El escenario fue compartido con Feli Colina, quien tomó el micrófono principal para cantar a solas “Martes”. También tuvo su momento el guitarrista y productor Nico Btesh, con un tema de su autoría que formará parte de lo nuevo.
Tras un poco más de una hora de canciones y continua interacción con el público, “Loco en el desierto” dio el cierre a lo que en realidad fue el inicio. Porque en los tiempos que corren, llenar un Niceto vendría a ser algo así como la consagración de una banda. Y lo lograron, consagraron su exitoso presente y como dice la mexicana “Sé que todo lo más lindo de este mundo / Por un rato lo PUDIMOS compartir”.