Morcheeba || Teatro Gran Rivadavia || 18.03.18
Mientras gran parte del país estaba pendiente del minuto a minuto del monstruo musical del Lollapalooza, el grupo inglés Morcheeba aterrizaba en suelo argentino vía directa desde São Paulo para presentarse el domingo 18 en el Teatro Gran Rivadavia.
Embarcados en un tour que tiene como estandarte tocar canciones de su amplia discografía, pero también adelantarnos temas de su próximo material. Este disco, que tiene previsto ver la luz el 1ro de junio de este año, se dice llamar Blaze Away.
En un domingo, muy domingo, nos adentramos en el Teatro y esperamos a que Morcheeba de comienzo a su cuarta performance en suelo argentino.
En un escenario minimalista, con cuatro esferas de boliches en línea recta a la altura media del telón, ingresan sigilosamente al escenario Steve Gordon (bajo), Jaega Mckenna-Gordon(batería), Ben Cowen(teclados), Ross Godfrey(guitarra), quienes van recibiendo aplausos a medida que van pisando las tablas. Aplausos que llegan a su punto máximo cuando ingresa Skye Edwards (vocalista), recibiendo una calurosa recibida por parte del público presente.
El público escucha expectante en su butaca la primera canción de la noche, el nuevo track Never Undo, pero cuando Skye incentiva a levantarse del asiento para disfrutar el show desde otra perspectiva, la gran mayoría presente no lo duda ni un instante.
En un mundo donde el entretenedor es denominado Showman, sin lugar a dudas la palabra asertiva para describir a la persona que llevara las riendas en esta noche es “Show-woman”. Calidez y naturalidad innata representa a la vocalista oriunda del sudeste de Londres. Skye nos entretiene con sus frases, nos cautiva con sus movimientos y nos incentiva a hacer lo mismo.
Morcheeba interpreta un set-list que nos remonta a sus inicios, transita sus cuartos intermedios y culmina con la presentación de nuevos temas de su próximo disco.
Los clásicos y ovacionados de la noche son los tracks The Sea, Otherwise, Blindfold y Rome wasn’t built in a day, pero Trigger Hippie fue el tema elegido para ir despertando a los dormidos para que al escuchar los acordes de Let’s Dance de David Bowie no se lastimaran al saltar de la butaca y puedan bailar al compás de su melodía.
Sencillos y con gran energía en escenario. Morcheeba no es una banda que pueda encasillarse en un solo género musical, sino que ensambla varios para lograr ese sonido buscado. Estilo propio, originalidad y “trip hop”.