1- Domingo por la noche, y el show empezó puntual. A las 21hs abrieron el telón, los plomos probaron sonido y tipo 21.15 salió la banda a escena para deslumbrarnos durante casi dos horas.
2- Nos sorprendió al no presentarse con una introducción, la mismo padeció algunos desperfectos de sonido que fueron rápidamente solucionados.
3- Kotzen alternó entre guitarra y piano en reiteradas ocasiones, además de cantar por supuesto, dejando en claro la clase de artista que teníamos enfrente.
4-Richie no habla mucho, pero cuando lo hace es para hacer alguna broma (por ej con los problemas técnicos dice «shit happens»), para comentar que estaba un poco enfermo debido a los cambios climáticos (esto no afectó en ningún momento la calidad de su voz), o agradecer el préstamo de la guitarra acústica con el que tocó el tema «I Would».
5-En este tema, el baterista deja su batería para tocar un cajón peruano y el bajista toca un contrabajo eléctrico, dejándolo en clima acústico como pide la composición.
6 -Algún fan cariñoso le alcanzó un dibujo hecho en lapicera que agradeció (y al otro día ya había subido a su página de facebook), mostrando la importancia que tuvo el gesto para él.
7- El momento virtuoso llegó cuando disfrutamos de un sólo de cajón por parte del baterista, seguido por un sólo de batería. En la canción siguiente, fue el turno del bajista de hacer su sólo, acompañado eventualmente por el piano y guitarra de Kotzen.
8-El virtuosismo del estadounidense estuvo a la orden del día cuando pasó la guitarra por detrás de su cabeza, regalando «el momento de la noche»
9-La última canción, «This is life» no estaba planeada, pero la hicieron ya que un fan la pidió a través de un papel que le tiró por la ventana del hotel, logrando conquistar una vez más el corazón de Kotzen.
10-«Salting earth», el disco que da nombre al tour, fue presentado en el Teatro Flores con un set list de 16 canciones, la gira continuó por Perú, Colombia, Uruguay y México.